Los recientes estudios científicos habían alertado de que el ritmo de fusión de los hielos puede estar cambiando la morfología de la capa helada que cubre esta enorme isla del Atlántico Norte y los últimos sucesos parecen darles la razón.
Un grupo de investigadores que trabajan en el trazado del mapa más preciso de la capa de hielo de Groenlandia, han descubierto que dos lagos formados por agua de deshielo bajo esa capa han desaparecido de forma vertiginosa.
La sorpresa se la han llevado de forma separada dos equipos científicos que publican sus resultados en las revistas The Cryosphere y Nature.
Uno de los lagos se ha vaciado para formar un gigantesco cráter de más de kilómetro y medio de ancho y 70 metros de profundidad, según detectó el equipo de Ian Howat, profesor de Ciencias de la Tierra en la Universidad de Ohio, a unos 50 kilómetros hacia el interior de la costa suroeste de Groenlandia. Ahí, las imágenes de satélite indicaban que había un lago subglacial, pero fotos recientes sugieren que probablemente se vació a través de un túnel de drenaje. En el cráter resultante, los investigadores calculan que pudieron almacenarse 25 millones de metros cúbicos de agua.
Lo curioso es que desapareció en unos meses, una velocidad insólita para los estándares geológicos.
Howat y su equipo sobrevolaron el lugar en abril de 2014, después de que notaran que la existencia del cráter, situado en medio de una extensión plana de hielo, no era un error en la captación de datos de superficie de alta resolución que habían estado recogiendo.
El segundo lago subglacial se llenó y vació dos veces en los últimos dos años. Fue descubierto por el equipo dirigido por Michael Willis, de la Universidad de Cornell, junto a Michael Bevis, investigador de la Universidad de Ohio, en marzo de 2013.
Estaban recogiendo datos de GPS para calcular el peso de la capa de hielo de Groenlandia cuando descubrieron el lago por casualidad.
A partir de los datos de satélite y de la NASA, estos expertos calculan que el lago se ha llenado y vaciado en dos ocasiones desde 2012, algo preocupante, ya que el agua transporta calor hasta la base de la capa de hielo, lo cual vuelve el hielo más inestable y provoca que cada vez haya mas “tuberías” por las que drenan los lagos.
Otros estudios apuntan a que el sistema de drenaje se ha extendido recientemente unos 50 kilómetros hacia el interior de la plataforma helada, que es justo donde está el primero de los lagos descubiertos.
Es como si el agua de deshielo hubiera empezado a desbordar el sistema de tuberías naturales bajo la capa helada causando reventones que acaban drenando lagos. A pesar de que se conoce desde hace tiempo la existencia de lagos subglaciales, los científicos nunca habían sido testigos de un proceso de drenaje.
Estos dos hallazgos repentinos indican, para el profesor Bevis, que la pérdida de hielo en Groenlandia ha alcanzado niveles dramáticos.